F, caminaba por el “puerto de productores”, caminaba tal “zombi”, sin vida, sin recuerdo alguno, su mirada estaba prendida en el suelo, diviso como espectros a un grupo de señoras comiendo anticuchos, un amigo se le acerco, le llamo por su nombre, el se acerco, dio carcajadas, dio explicaciones absurdas de por qué estaba caminando, vio a C, no pudo reaccionar, su cuerpo caminaba solo, su mente estaba en blanco, W, se le acerco como cerrándole el paso, para que se detenga, pero F, esquivo su presencia, y cruzo la pista, busco las calles intransitables, suponía que le andaban buscando, no sabe por qué, no sabe por qué caminaba, cruzo calles plagadas de juventud con sonidos de vasos y escupitajos al suelo, botellas que sonaban al compas de un “salud”, se detuvo con la presencia de una balde vacio y dos rodillos, lo miro fijamente, se quedo prendido de la figura, es como si algo hubiese en esos plásticos inertes, como si un mensaje escondido quisiera que sea descubierto, alzó los pies y siguió caminando, el pasaba como si nada le importase en este mundo, camino por calles solitarias, y sintió ganas de llorar, la barbilla le temblaba, quería derramar una lagrima, pero sacaba fuerzas, llego a su barrio, la calle estaba en silencio, señales de humo en la esquina, unos tipos flacos, pálidos, le saludaban, el respondió alzando la mano, paso por una “ramada”, y se topo con su amigo, su amigo no necesito nada para saber que F estaba mal, le ofreció agua, F acepto, le dijo que no se preocupe mas, agradeció por el agua y se despidió amablemente, no se acuerda mas, su mente entro en blanco, al día siguiente se levanto, sin saber cómo llego a su casa, se saco los pantalones mojados y rotos, reviso su billetera, solo recuerda que estaba feliz, sentado en una mesa con sus amigos y su novia, se levanto y se dio cuenta, que no tenía ni amigos, ni dinero, ni celular, ni novia, abrió los ojos, y no encontró su vida, cerró los ojos, y siguió caminando.
Teresa Ruiz Rosas: “Me interesó cómo aquel personaje podía ser tan
importante para los músicos”
-
La escritora arequipeña nos habla de su novela El copista (DeBolsillo,
2024), recientemente reeditada
Hace 1 día
5 dejaron el sueño, y COMENTARÒN:
wena historia, parec q "f" taba borracho :P jeje
saludos
qué interesante :)
tan buenas las tabas. De que falda las hiciste?
broma.
Bye.
Ese Zombie eres tú!!
y estabas más borracho!!
con dos vasitos habias perdido la conciencia jeje
jaja, ta wena la hisrita eh, "F" muy parecido a realidad (¿f-incidencia?)
Publicar un comentario